Agua y Jabón
iglesia cristiana evangelica Manantial de vida sevilla
He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí;
y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel
del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los
ejércitos. 2. ¿Y quién podrá
soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando él se
manifieste? Porque él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores. 3. Y se sentará para afinar y
limpiar la plata; porque limpiará a los hijos de Leví, los afinará como a oro y
como a plata, y traerán a Jehová ofrenda en justicia. 4. Y será grata a Jehová la ofrenda de Judá y de Jerusalén,
como en los días pasados, y como en los años antiguos. 5. Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo
contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que
defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen
injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los
ejércitos. (Malaquias 3:1-5)
Dios habla al pueblo a través del profeta y está anunciando un
acontecimiento trascendental para la historia de la humanidad: La venida de
nuestro Señor Jesucristo.
En este pasaje vemos
varias cosas:
1.- Dios envía a su
mensajero.- Dios mandó a Juan el Bautista, que fue el mensajero de Jesús.
Fue escogido desde el vientre de su madre, no lo escogió él.
Dios envía los mensajeros, no nos enviamos a nosotros mismos, Dios escoge a
aquellos que han de ser sus mensajeros y los manda.
2.- “Preparad el camino delante de Dios”.- Los mensajeros han de
preparar el camino a Dios.
No sustituyes a Dios, sino que le preparas el camino para que él actúe.
3.- Fuego y Jabón.- (V.23) Jesús es fuego y
jabón. Fuego que limpia y jabón que limpia.
El pueblo de Israel se encuentra mal, despistado por el pecado, pero Jesús
viene a limpiar con fuego y con jabón.
El jabón limpia sin agredir, quita la suciedad con agua.
El agua de la palabra nos limpia y quedamos limpios.
Pero hay otra suciedad que solo se quita con el fuego. El fuego viene a
quemar lo que estorba y a arreglarnos.
Hay cosas que no salen con el jabón, porque forman parte de nosotros, y
para eso es preciso el fuego.
Cuando un metal está sucio, mezclado con otros metales, no se pueden
separar con agua, hace falta fuego y tras derretirlo el buen metal se puede
separar del malo y sale más puro.
4.- Cuando estás limpio
traes ofrenda de justicia.- Dios solo acepta ofrendas de corazones limpios.
Las ofrendas no limpian, la limpieza la hace Dios, y cuando estamos limpios
entonces hacemos ofrenda con justicia.
Lo correcto es primero limpiarse y luego ofrendar.
Cuando busca a Dios, está en comunión con Él, le ama, le pide perdón,
entonces Dios se agrada de sus ofrendas.
5.- Como en los días
pasados.- Empezaron bien pero se desviaron.
“Cuidad vuestra salvación con temor y temblor” Cuidemos nuestros
pasos, es fácil desviarse.
Lo que empezó bien, puede acabar fatal.
6.- ¡Lo que había en el
pueblo de Dios!.- Hechiceros, adulteros, mentirosos, explotadores de los débiles.
Todo esto estaba en Israel. El pueblo elegido se había llenado de todas
estas barbaridades.
Todo empezó por jugar con los pueblos vecinos.
Consultar a los ídolos paganos, casarse con las mujeres de fuera, tontear
con el pecado y acabar siendo iguales que aquellos que desagradan a Dios.
El diablo va a meterse por las puertas que les abras, y luego vas a tener
un problema. (orgullo.- caída)
7.- No tener temor de
Dios.- La puerta a la destrucción es no tener temor de Dios.
Vivir actuar como si no fuésemos a ser juzgados.
Quitar a Dios como juez.-
“Dios es amor”.- por tanto puedo hacer
lo que quiero, el me perdona.
“Una vez salvo, siempre salvo”.- Por tanto puedo hacer
lo que quiero, voy seguro al cielo.
Andemos en temor a Dios “Dios es un Dios celoso” no quiere que juegues con
otros dioses ni con cosas que le desagradan.
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